viernes, 6 de febrero de 2015
jueves, 10 de abril de 2014
Tiempos conversos, María del Carmen Raigón
PRESENTACION TIEMPOS CONVERSOS, MARIA DEL CARMEN RAIGÓN
Buenas noches, estimados lectores y amigos de Mari Carmen.
Hoy estamos aquí para mostraros este nuevo libro con vida, el segundo poemario publicado de Mari Carmen Raigón; este libro convulso como la vida misma, la que acecha a la autora en estos momentos intensos de enseñante y madre; este libro converso como los inteligentes que no tienen miedo al cambio, inteligencia adaptativa que también nos muestra la poeta en estas hojas al acoger en sí a la voz de su adolescente personal; este libro con versos porque contiene poesía o lo que yo daré en llamar durante esta presentación protopoesía, la raíz de los poemas maduros. Y aquí estoy, invitada por mi compañera de Indocencias, para humildemente aportarles mi visión sobre este pequeño libro que sostengo, titulado Tiempos Converso.
Hoy estamos aquí para mostraros este nuevo libro con vida, el segundo poemario publicado de Mari Carmen Raigón; este libro convulso como la vida misma, la que acecha a la autora en estos momentos intensos de enseñante y madre; este libro converso como los inteligentes que no tienen miedo al cambio, inteligencia adaptativa que también nos muestra la poeta en estas hojas al acoger en sí a la voz de su adolescente personal; este libro con versos porque contiene poesía o lo que yo daré en llamar durante esta presentación protopoesía, la raíz de los poemas maduros. Y aquí estoy, invitada por mi compañera de Indocencias, para humildemente aportarles mi visión sobre este pequeño libro que sostengo, titulado Tiempos Converso.
Esto que voy a contarles es algo así como un secreto, no
debería decirlo en público, porque es mi modesta visión y sé que
inevitablemente, al transmitírselo desde este lugar privilegiado que hoy Mari
Carmen me ha querido dar, influiré en
sus opiniones así que, aunque no en susurros, se lo cuento como aquello que no
hay que creer del todo sino que hay que comprobar (comprándose el libro).
Mari Carmen me llama hace cosa de dos meses, cuando yo aún
estaba embarazada, y me pide que presente este libro ( Hoy mi hija ya ha nacido
y está en este mismo patio así que aprovecho para disculparme si tuviera que
ausentarme de la mesa por este motivo en algún momento en que me reclame). Cuando Mari Carmen me llama para pedirme que
presente Tiempos Conversos, me lo
pide desde la ilusión y la fe ciega que acompaña su discurso y que he podido disfrutar
en las pocas veces, pero hermosas, en que hemos coincidido en este mundo. Esa
ilusión y fe ciega tan propia del adolescente que hay en nosotros.
Me habla de él con el
cariño y el esmero de una madre que preparara a su hija para la salida al
mundo, una de esas antiguas puestas de largo a los 15 años. Me habla de las
filigranas que acompañan a las palabras, de la estética cuidada del libro y del
sentir profundo, de la necesidad de parirlo en este momento: una necesidad que no parte de lo racional sino
que hunde su pulsión en lo más vital y presente de su vida. Ella, profesora,
madre y adolescente eterna, convulsiona en este libro que, probablemente, algo
haya convertido en ella, porque cada palabra que parimos también nos transforma
a nosotros, los parturientos, los que escribimos – a veces incluso- con dolores
y placeres de parto.
Y digo adolescente eterno porque poco se habla del
adolescente que llevamos dentro y mucho del niño. Y el adolescente está ahí, latente,
profundo, vívido, locuelo, confuso, descalabrado, enamoradizo, con aires de
cambio constante, de intenso presente continuo y de pretérito imperfecto, como
reza uno de los poemas de Mari Carmen en este Tiempos conversos. El adolescente que está deseando dejarse oír y
que no se atreve a decírnoslo de frente a los adultos, que acaba gritando para
que lo escuchemos desde esa mezcla de emociones del no saber qué decir o qué
hacer, y hacer y decir de todo para, al
menos, ser visible.
Y la poesía que contienen estos protopoemas es una poesía
adolescente y para adolescentes. Su lenguaje sencillo, de vocabulario básico,
de emociones a flor de piel, de enamoramientos ligeros pero que parecen eternos;
su búsqueda del camino, la confusión que exuda, el juego en algunos de los poemas que se acerca
a lo propio de un taller de poesía; la elección de la palabra en ese universo de miles de
opciones y de conversión, sendero al mundo adulto, alumbra a estos poemas: alimento de almas en camino adolescentes y
excreción nutritiva del alma adolescente de Mari Carmen. Mari Carmen, que
recuerda también sus alimentos primeros poéticos, con ecos de Alberti, Lorca o
Neruda en estos sus versos.
Creo que esta es la máxima bondad del libro. Creo que les
gustara a los adolescentes y se sentirán identificados con él, con su ritmo de
antítesis, de temas amorosos y búsquedas personales y académicas, de lo básico.
Creo que el lenguaje que ha elegido Mari Carmen es el mismo de nuestros
alumnos, hijos e hijas, de los adolescentes, de estas personas en camino. Estas
protopersonas
que en la vía de ser ya son en la misma línea de estos poemasjuego o protopoemas
que en el camino de ser poemas de madurez, en el juego de la palabra, de lo
básico y simple, ya son poemas hechos y de derecho para este público que se
expresa con la misma voz que María del Carmen Raigón ha elegido para estos
versos sin tallar. Poemas en camino de ser para los que están en el camino del
encuentro.
La adolescencia, secreto a voces, un secreto de no saber
nada y por eso mostrar que todo lo sabemos. La adolescencia, un secreto de lo
interno, del no ser o no saber qué se es, lo que justo el adolescente se afana
en esconder en este periodo. Esa confusión con apariencia de seguridad
descabellada, esa dependencia profunda con apariencia de independencia convulsa,
a tumbos y buscando la llave de la propia vida, a gritos que de tanto esconder
lo que no se sabe, acaba rebosándose desproporcionado y convulso. Todas estos
modos y estilos, propios de nuestro adolescente eterno son las que,
generosamente, comparte la voz de Mari Carmen en estos protopoemas.
Y termino como empiezo con la ese del secreto, la ese que
serpentea en muchos de los versos de este libro que sostengo: sin saber quién soy, sin saber qué quiero,
sin saber qué tengo, no sé ser para mañana si hoy no soy nada, miles de sueños
que se agitan esperando salir, y si los suelto…, siempre me dejo las llaves puestas,
estoy cansado de no ser yo mismo. El secreto a gritos y que no les costará
desnudar durante la lectura de Tiempos
Conversos.
Y ahora me pregunto si se habrán creído algo de todo esto,
que es mi particular visión y tal vez absolutamente descabellada. Así que,
finalmente, creo y concluyo que no les quedan muchas más opciones que comprobarlo
como buenos adolescentes que seguirán siendo: no creer en mi palabra de
antemano y, mediante la propia experiencia lectora y de apertura, sentir o no
este secreto compartido del no saber a dónde voy y del te quiero con besos del
eterno adolescente que llevan dentro.
Muchas gracias y que disfruten.
MON
En este enlace pueden leer la reseña de la presentación en Villamartín en la página del ayuntamiento de esta localidad: http://www.villamartin.es/opencms/opencms/villamartin/actualidad/noticias/noticia_0336.html
En este enlace pueden leer la reseña de la presentación en Villamartín en la página del ayuntamiento de esta localidad: http://www.villamartin.es/opencms/opencms/villamartin/actualidad/noticias/noticia_0336.html
El segundo parto
Son las cuatro de la mañana y no puedo dormir. Es mi segundo embarazo, semana 33. Empiezo a pensar en el nido y crece la necesidad de tenerlo todo listo. Me levanto a bichear sobre segundos partos y me encuentro este emocionante artículo de un parto en casa. Esta vez he planteado mi parto en un hospital, en Cádiz, en pleno carnaval. Pienso si no estaré loca por irme allí al leer esta experiencia.
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